DURANTE ESTA SEMANA HABLAREMOS DEL
GRUPO DE PARES COMO FACTOR PROTECTOR EN LA PREVENCIÓN DEL CONSUMO DE DROGAS Y ALCOHOL EN NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTEs
En cuanto a la prevención del consumo de alcohol, drogas y otras sustancias, se visualiza como un importante determinante, el grupo de pares, es decir, con quiénes se relacionan los niños, niñas y adolescentes.
Según el psicólogo y psicoanalista Erik Erikson, la etapa de la adolescencia, desde los 12 a 18 años aproximadamente, es una transición elemental, donde se comienza a formar su propia identidad a partir del resultado de sus exploraciones, en cuanto a conductas, estilos y grupos, como forma de buscar su identidad, proceso que también involucra algún grado de rebeldía respecto a la imagen familiar y parental, el joven comienza a ser resistente en cuanto a la autoridad y las normas, y toma conciencia de que los padres no son perfectos. En la búsqueda de obtener autonomía emocional y económica, el adolescente se separa progresivamente de su familia de origen, lo que habitualmente generará conflicto con sus adultos cuidadores y como parte de este mismo proceso, establecerá lazos emocionales cada vez más profundos con personas de su misma edad, ya sea con amigos o pareja.
El adolescente se siente como centro de atención, preocupado en su propia conducta y apariencia física, vestimenta, peinado, accesorios, lenguaje y música, y tendrá conductas específicas e incluso de riesgo, para ser admirado y admitido por otros de su misma edad.
La presión de los pares puede influir tanto en forma positiva, motivándolo a destacar en lo académico, deportivo, realizando actividades enfocadas en el desarrollo de una vida saludable, como también negativamente, favoreciendo, por ejemplo, que se involucre en conductas de riesgo, con el fin de ser aceptado dentro del grupo.
Es importante que los padres o adultos cuidadores faciliten que su hijo o hija adolescente consolide una identidad propia y se haga independiente, tanto para favorecer su desarrollo saludable, como para que este vuelva a acercarse a la familia más tarde. Esto no quiere decir, que el joven no tenga normas y límites, sino que un proceso acompañado.
¿Es importante entonces, saber cuáles son las amistades que tiene mi hijo, para prevenir el consumo de alcohol y drogas en la adolescencia?
Sí, es de suma importancia conocer con quiénes se están relacionando y saber a su vez, dónde se encuentra cuando sale. Un equilibrio en cuanto a su independencia, las normas y límites que se han planteado en el núcleo familiar permite que los jóvenes perciban un ambiente de desarrollo seguro y confiable.
